Mitos, Tabúes y Realidades
La realidad es que si bien ciertas teorías o técnicas psicológicas son incompatibles con las enseñanzas del Islam, descartar la psicología y los importantes beneficios que ofrece en conjunto con el islam, sería un gran error.
A diferencia del enfoque secular, el punto de vista islámico no diferencia entre el conocimiento científico y la religión, sino que cree que funcionan mano a mano. La Revelación (el Corán y la Sunnah legal) es de Dios, de Allah, por lo tanto, es la verdad suprema. La ciencia, sin embargo, es el producto del razonamiento humano que, aunque el Islam valora mucho, sigue siendo secundario a la revelación, ya que puede incluir errores. Por lo tanto, los musulmanes pueden y deben beneficiarse de las investigaciones y las experiencias científicas, siempre y cuando estén de acuerdo con lo que enseñan el Corán y la Sunnah legal del Profeta (la paz y las bendiciones sean con él). Esto es lo que realizan los que trabajan con la psicología desde la perspectiva islámica.
Para el psicoterapeuta es imprescindible un buen conocimiento sobre la creencia ('aaqīdah) y de la naturaleza humana. Desde hace años, puede estudiarse la carrera de psicología islámica y otras ciencias sociales, donde son avaladas por diversas universidades islámicas del mundo. Se entiende que las estrategias terapéuticas solo se verán potenciadas cuando son aplicadas a través de los principios islámicos del Corán y la Sunnah. De lo contrario, los avances, aunque también sean positivos, tendrán sus limitaciones. Cualquier estrategia terapéutica estará sujeta al vínculo que tengamos con Allah. Para esto, es primordial conocerse a sí mismo, y aquí es donde la psicología islámica trabaja. ¿Pero cómo? Eso requiere una explicación más extensa, pero una vez nos contacte, nos comprometemos a acompañarle en este proceso.